3 de mayo de 2009

Mapas colaborativos. Cara y cruz

Google Maps es una herramienta muy fácil de usar, no se necesita ser un profesional para meterle mano. Dentro de la filosofía 2.0 en la que el usuario es también generador de contenido, los mapas colaborativos son realmente fáciles de crear. Esto en principio es bueno, muy bueno. Pero también tiene sus puntos flacos.

Ocurrió por ejemplo con el mapa de casos de gripe porcina (o nueva, o A) al que tanto bombo se le dio. Cualquier ciudadano del mundo podía incluir un caso. El problema: uno veía estornudar a su vecino y lo metía en la lista, aumentando la alarma. Además, algunos colocaban casos sospechosos, pero no era tan fácil que luego los borrasen cuando se descartaban. A los dos días el mapa ya era obsoleto, confuso y alarmista.


View 2009 H1N1 Flu Outbreak Map in a larger map

Ahora, aún con fallos, ha habido correcciones y está bastante mejor. Pero ha dejado de ser colaborativo, o al menos las colaboraciones no son muy intuitivas. Yo al menos no he podido hacerlas.

Sin embargo, en otros casos se puede pedir ayuda a los lectores y que un medio (o una organización) actúe como filtro. Es el caso de este mapa de vertederos de La Voz de Galicia.



El mapa totalmente abierto tiene otros problemas. Un ejemplo lo tenéis en esta misma página, arriba a la derecha. Cualquiera puede introducir sus datos en el mapa de infografistas. Nosotros trabajamos con ordenadores, software, cartografía... Si cometemos errores en ello, imaginaos un lector medio. Aún así hay problemas con el mapa cada dos-tres días: gente que sin querer borra las instrucciones, algunos medios, los convierte en otras cosas (alguien se cargó todos los infografistas de España y los convirtió en localizadores de almacenes de aceite de oliva...), o añade 200-300 marcas vacías.

Defiendo a capa y espada la participación del lector, creo que es de gran ayuda. Pero si ofrecemos contenidos hechos por profesionales hay que añadir profesionalidad: a modo de filtro que compruebe que los datos sean reales, que no se repiten o que se meten bien, o como ayuda con el software, o como sea. Pero no podemos pedir al lector que trate la información como la trata un profesional. No es por mala intención, incluso en muchos casos harán cosas mejor que algunos profesionales, pero al fin y al cabo tampoco todos tienen el tiempo y el conocimiento de alguien a quien paguen por ello.
Sí al periodismo ciudadano y a la colaboración. No a esperar que los contenidos nos los hagan otros y nos olvidemos de ellos.


NOTA: Ha sido escribir este post y alguien ha borrado (supongo y espero que sin querer) gran parte del mapa de infografistas. Si a alguno se os ve bien, por favor avisadme...

3 comentarios:

Nicolas dijo...

El mapa de infografías está en blanco!! No creo que haya sido un accidente. Piensa mal y acertarás. Es que hay cada idiota por ahí...

Ariel Glaz dijo...

Muy interesante!
Gracias por este articulo!

Nicolas dijo...

Perdón, quise decir "Mapa de infografistas". ¿Y cómo se hace ahora? ¿Hay alguna manera de rescatar la información o hay que volverlo a hacer?